La ruleta es uno de los juegos de casino más antiguos ya que se remonta a siglos atrás. Aunque el movimiento de la rueda se basa en el azar, puedes construir una buena estrategia para disfrutar aún más de tus partidas. Existen métodos para ir a lo seguro y minimizar las pérdidas, pero la estructura del juego siempre da ventaja a la casa. Téngalo en cuenta cuando sienta la tentación de probar un método que tiene pocas posibilidades de éxito. Si juegas por dinero, recuerda apostar de forma responsable para poder seguir divirtiéndote cuando pruebes tu suerte.
1. Práctica
Antes de apostar dinero, intenta ver si tu casino favorito tiene una mesa de ruleta relampago en la que puedas jugar gratis. Si no, puedes comprar tu propia ruleta para jugar en casa y familiarizarte con el juego. Eso te mostrará las diferentes apuestas que se pueden realizar en el tapete, que es una mesa de tres columnas con los 36 números de la ruleta.
2. Haz apuestas externas
Esta es la mejor oportunidad de ganar. Cuando coloques la cantidad mínima de la mesa para cada apuesta individual, puedes hacer múltiples apuestas externas para aumentar tus posibilidades de ganar. Por ejemplo, si apuestas 1 euro a los números pares y 1 euro a los números negros, ganará 2 euros si la bola se detiene en el 10 negro y acabarás con tu importe inicial si se detiene en el 16 rojo.
3. Modera tus apuestas internas
Las apuestas internas permiten ganar una gran suma, pero son más difíciles de ganar. La apuesta a un solo número (conocida como “número completo”) es la que más paga, pero también la más arriesgada ya que la bola tiene una probabilidad de uno entre treinta y siete (2,7%) de caer en su número en una ruleta europea y una probabilidad de uno entre treinta y ocho (2,63%) en una ruleta americana. En lugar de apostar a un solo número, tienes la opción de repartir tu apuesta entre varios.
4. Intenta predecir el movimiento de la bola
Mientras rueda por la pista, observa cuándo pasa por un punto fijo, como la casilla 0. Intenta adivinar cuándo se frenará, caerá y empezará a golpear los deflectores alrededor del círculo numerado. Esto es difícil, pero con la práctica puedes ser capaz de predecir en qué sección de la rueda caerá la bola cuando deje de botar.
5. Fíjate límites
Fíjate un importe máximo para tus ganancias y tus pérdidas. Tanto en la ruleta como en cualquier otro juego, apuesta una cantidad que pueda permitirse perder. Una vez que hayas fijado este límite, aténgate a ella y no cede ante la tentación de apostar más. Es fácil perder rápidamente grandes sumas de dinero, especialmente en un juego que va tan rápido.
6. Mantenga tus beneficios
Haz apuestas cada vez más pequeñas. Si empiezas apostando 100 euros y terminas con 150 euros, quédate con los 50 euros que has ganado en lugar de añadirlos a la siguiente apuesta y sigue apostando con tus 100 euros originales. De este modo, tus pérdidas totales no pueden superar los 50 euros y siempre ganarás.
7. No confíes en las probabilidades
Recuerda que la ruleta es un juego de azar y que nada está garantizado. La verdadera clave es tener suerte y parar antes de que sea demasiado tarde. En cada giro, la bola tiene una posibilidad entre treinta y siete (ruleta europea) o treinta y ocho (ruleta americana) de detenerse en un número concreto. Cada giro es un nuevo juego con sus propias apuestas, pero cuanto más tiempo se juegue, más probable es que se caiga en las trampas de probabilidad que estructuran el juego.
