A la hora de trabajar con vídeos en Internet tenemos una amplia variedad de formatos para elegir. El estándar más aceptado actualmente es el MP4, apto tanto para la reproducción de contenidos multimedia en casi cualquier dispositivo como para compartir esos contenidos a través de redes sociales y subirlos a la web.
Sin embargo, esto no quiere decir que a veces no encontremos contenidos multimedia en formatos diferentes al MP4, tal como pasa con los archivos MOV. En este caso, debido a las limitaciones que tiene este segundo formato de vídeo, es posible que encuentres ciertos problemas a la hora de reproducir o compartirlo a través de Internet. Para solucionarlo, lo mejor es convertir ese tipo de archivo a ese formato MP4 que hemos mencionado, cuya compatibilidad es mucho mayor a la del archivo MOV.
Qué es un archivo MOV
Antes de empezar, conviene saber de qué estamos hablando. Un archivo MOV es un formato multimedia que se dedica a almacenar contenido de vídeo en formato MPEG4. Este fue desarrollado por Apple para su utilización junto con el programa QuickTime en el año 1998. Por aquel entonces, la compañía de la manzana era partidaria de lanzar estándares para todos sus productos y separarse de forma considerable de los formatos universales que cada vez se iban implantando en más dispositivos capaces de trabajar con vídeo multimedia. Con el paso del tiempo, este formato ha ido ganando en popularidad principalmente gracias a ser uno de los estándares que la firma utiliza en sus dispositivos. Y aunque es cierto que hoy día generalmente no tendrás problemas para reproducir archivos MOV en un ordenador o incluso en un móvil, también lo es que hay otros equipos en los que esta compatibilidad no existe.
Qué es un archivo MP4
Un archivo MP4 es un contenedor que permite almacenar vídeo y audio multimedia bajo compresión y con diferentes codificaciones respecto a su calidad. Una de sus principales ventajas es que este formato se ha convertido prácticamente en el estándar actual a la hora de guardar cualquier archivo de vídeo con una alta calidad. También es el formato que utilizan muchos dispositivos de grabación de vídeo para almacenar las imágenes tomadas a través de ellos, por lo que su importancia es más que considerable. Todo ello sin olvidar una plena compatibilidad con cualquier página web o navegador a la hora de subir contenido multimedia a Internet. Por tanto, no es extraño que este tipo de archivo sea cada vez más frecuente dentro del mundo multimedia actual.
Cómo convertir un archivo MOV al formato MP4
Aunque existen ciertas semejanzas entre estos dos archivos en cuanto a su finalidad y su estructura, pues ambos se basan en un sistema de pistas, lo cierto es que no son totalmente iguales. Los sistemas de compresión y gestión de los datos usados en cada uno de ellos son diferentes y no es posible usar un archivo MOV como un MP4 ni viceversa. Esto genera la necesidad de conversión que hemos mencionado anteriormente, para lo que disponemos de dos alternativas principales.
Conversor de archivos de vídeo online
Si el vídeo que queremos compartir es de poca duración y tenemos una buena conexión a Internet, la idea de usar un convertidor online es la más sencilla. Para proceder solo tenemos que cargar el archivo MOV que queramos convertir en la página web de conversión que hayamos elegido, seleccionar los parámetros correspondientes para la conversión y finalmente pulsar en el botón “Aceptar” para que este se lleve a cabo. En general, el proceso no tarda demasiado tiempo, aunque sí es cierto que al tener que subir, convertir y descargar posteriormente el archivo convertido, el proceso puede ser algo lento en caso de que nuestra conexión a Internet no sea de alta velocidad. De todos modos, no deberíamos tardar más de cinco minutos en tener nuestro archivo ya descargado y convertido, a menos que la extensión del mismo sea considerable.
Como extra, algunos conversores de vídeo online nos ofrecen la posibilidad de realizar pequeñas transformaciones en el contenido, tales como ajustar el audio al volumen que más nos convenga, recortar aquellas partes del vídeo que no queramos convertir o incluso modificar la calidad de imagen final obtenida en función del nivel de resolución de la fuente. Como inconveniente, el hecho de subir el contenido del vídeo implica que este escapa un poco de nuestro control. Aunque es cierto que las páginas que se dedican a convertir vídeos suelen ser totalmente seguras, aquellos usuarios que suban vídeos personales tal vez no deseen compartirlos con un tercero, aunque sea para transformarlo en un formato más práctico y manejable.
Conversor de vídeo local
En caso de que no quieras utilizar un conversor de vídeo online, dispones de varias herramientas locales para convertir tus vídeos al formato que más te convenga. Muchas de estas funciones están integradas en las aplicaciones de edición de vídeo, por lo que basta abrir el archivo, elegir el formato de destino y hacer los retoques que queramos para tener la conversión sin necesidad de subir nada a ningún sitio. También existen diferentes programas gratuitos que podemos descargar a través de Internet para ejecutar dichas conversiones. Dado que hablamos de dos de los formatos de vídeo más habituales en la red no tendremos problemas con la compatibilidad de las aplicaciones respecto a la conversión de formato MOV a MP4.
La principal ventaja de este sistema es que todo el proceso se realiza de forma local, así que ni siquiera necesitamos una conexión a Internet. Otra ventaja es que el proceso permite personalizar el contenido de forma eficiente mediante un completo editor de vídeo ajustado a nuestras necesidades. Esto también afecta a la velocidad del proceso de conversión, sobre todo si tenemos un ordenador potente, que dejará nuestro archivo transformado a MP4 en cuestión de minutos.
Además, estos programas tienen la ventaja de no sufrir la limitación de tiempo que algunas soluciones online sí tienen a la hora de convertir archivos. El principal inconveniente es que estas aplicaciones requieren de unos ciertos conocimientos para ejecutar la conversión, que no todos los usuarios tienen. Por otro lado, también es necesario descargar e instalar el programa correspondiente, que debe ajustarse a nuestras necesidades concretas.
