Las criptodivisas están a la orden del día, y sin duda conoces a muchas personas que apuestan por comprarlas o minarlas sin entender bien cómo salvaguardarlas o mantenerlas seguras. Por ello, debemos tener en cuenta una serie de precauciones para evitar que nos roben las criptomonedas o para mantenerlas a salvo.
Existen, por ejemplo, muchas formas de comprar Bitcoin, y si quieres continuar en este mundo de manera segura debes proteger tu monedero, para ello hay una serie de consejos y tácticas para hacerlo.
1. Tener una copia de seguridad
Los monederos de bitcoin de hoy en día, en particular los monederos no custodiados, proporcionan lo que es posiblemente el mejor y más seguro tipo de copia de seguridad que podemos tener: la seed phrase.
Simplemente duplica esta colección de 12, 18 o 24 palabras y ponla en un lugar físico seguro al que sólo tú tengas acceso. Si su cartera se pierde, es robada o destruida, podrá recuperar su dinero de forma rápida y sencilla utilizando esas frases.
Recuerde que cuando hace uso de las criptomonedas, usted es su propio banco, y la seguridad de su dinero está siempre bajo su control.
2. Controla las claves
Algo aparente y racional está relacionado con lo anterior: empleamos un conjunto de claves para protegernos (las claves privadas y de cartera), y debemos hacerlas lo más seguras posible. Al intercambiar criptomonedas hacemos uso de distintas plataformas, brokers de criptoactivos, robots como Bitcoin Billionaire y monederos, por ello las contraseñas juegan un papel fundamental para estar protegido. Evita usar la misma para todas tus cuentas.
Como clave del monedero, no elijas una contraseña fácil de adivinar o de hackear, ya que cualquiera puede acceder y robar todo lo que hay en ella. Y, aunque parezca obvio, no debes proporcionar la clave privada a nadie.
3. Elegir un buen monedero o wallet
Podemos almacenar criptodivisas como Bitcoin o Ethereum en monederos virtuales. Sin embargo, hay dos tipos: monederos fríos y monederos calientes. Los fríos son los más seguros ya que tienen un formato físico y no están conectadas a Internet. Los monederos calientes están conectados a Internet y son más prácticos, pero también suponen un peligro adicional, ya que pueden ser hackeados con una mayor facilidad.
4. Elegir varios monederos
Otra solución aconsejada es utilizar varios wallets para salvaguardar la principal. Por ejemplo, si utiliza una tarjeta de prepago para transacciones en línea que no esté vinculada a su banco, ocurre lo mismo. Puedes tener un monedero que “rellenes” con cantidades modestas y que utilices para las transacciones diarias, así como un monedero principal que almacene la cantidad principal. Será más seguro si no se utiliza.
5. Cifrado para proteger los datos
Busque siempre programas que realicen una encriptación efectiva de sus datos para que nadie más pueda acceder a ellos. Un monedero de criptomonedas decente utilizará al menos AES-256 con SHA-256 para salvaguardar sus claves del acceso no deseado.
6. Usar monedero Hardware
Si tienes la suerte de tener una modesta fortuna en criptodivisas, protégela utilizando un monedero de hardware o un nodo de criptodivisas completo en un ordenador seguro. Las carteras de hardware proporcionan un grado de protección a sus claves que sólo es rivalizado por los nodos completos, por lo tanto, estos dos métodos se sugieren para almacenar su pequeña riqueza.
Evite utilizar carteras de custodia (programas web en los que otros restringen el acceso a sus fondos) o carteras en su smartphone (incluso si estas carteras no son de custodia).
7. Mantén tus dispositivos resguardados
Si quieres mantener tu dinero a salvo, empieza por tu ordenador y tu móvil. Lleva un registro de lo que instalas, de los lugares que visitas y de la duración de tus sesiones de navegación en el PC y en el móvil. Por ejemplo, si vas a instalar un programa, vigila de dónde lo has sacado, ejecútalo a través de un antivirus (incluso Windows Defender hace un buen trabajo) y si algo te da un aviso no lo ignores.
Si te gusta navegar por Internet durante horas, vigila tu navegador, sobre todo cuando uses el acceso a servicios web.
