Kevin Mitnick Historia del Hacker más Buscado
Kevin Mitnick Historia del Hacker más Buscado

Kevin Mitnick: Historia del Hacker más Buscado

La figura de Kevin Mitnick sigue siendo conocida por muchos hoy en día. Aunque su apogeo fue en la década de 1980.

Es el hombre que ha convertido las palabras “hacker” e “ingeniería social” en nombres familiares. Kevin Mitnick empezó cuando los ordenadores no eran de uso común y muchos teléfonos tenían un marcador de disco. Hoy trabaja como consultor de seguridad informática, y hace 30 años fue el primer hacker de Estados Unidos y la captura más codiciada del FBI.

Te contamos cómo Kevin llegó a este punto.

“Al fin y al cabo, mi objetivo era ser el mejor hacker”

Kevin Mitnick

La Biografía Corta de Kevin Mitnick

La biografía hacker de Kevin comenzó con el pirateo del sistema de venta de billetes de transporte público de Los Ángeles.

El mayor hackeo, según Kevin, se produjo cuando pirateó el sistema militar estadounidense para advertir de ataques.

Además, Cóndor (apodo con el que se le conocía en la comunidad de hackers) había pirateado las redes informáticas de importantes desarrolladores de software y redes telefónicas.

Breve biografía de Kevin Mitnick
Breve biografía de Kevin Mitnick

Incluso consiguió piratear el servidor de un tribunal estadounidense y borrar sus datos.

Por no hablar del caso del guardián de la prisión donde acabó Kevin. Bloqueó el teléfono de su casa y reseteó su tarjeta de crédito.

El hacker estaba especialmente interesado en los secretos empresariales y su pasión eran las líneas telefónicas.

Nota

Algunos dicen que Mitnick es menos un hacker que un genio de la ingeniería social. Conseguir que una empleada de la oficina hablara con él y le permitiera acceder a la red de la empresa le resultó fácil.

El Comienzo de la Historia de Kevin Mitnic

Mitnick empezó a piratear (“hackear“) a los 16 años. Por aquel entonces, en 1979, ni siquiera se consideraba una actividad delictiva, no había leyes al respecto, ni era un fenómeno de masas. De hecho, al contrario, los profesores y los padres fomentaban ese entusiasmo por los conocimientos informáticos. Tampoco había dudas éticas.

Si podías piratear el ordenador de un colegio, te consideraban un mago. Si lo hicieras hoy, te expulsarían o llamarían a la policía. Más tarde se criminalizó“, recordaba el propio Kevin en una entrevista hace 10 años.

Para el propio hacker, se trataba más de un juego que de una infracción de la ley. Lo calificó de aventura, emocionante y aventurero. Usando su propia inteligencia, Mitnick superó obstáculos en este gran juego.

Y todo empezó con los viajes en autobús.

Ingeniería Social en Acción

Cuando Kevin tenía 12 años, se trasladaba mucho por Los Ángeles. No es que su familia tuviera mucho dinero. Al contrario, no siempre había dinero suficiente ni siquiera para un billete de autobús. Un día, el chico estaba mirando su billete y se dio cuenta de que el sistema se basaba en un patrón de pinchazos inusual realizado por el conductor. Y ese esquema dependía del día, la hora y la ruta.

Un amable conductor le preguntó dónde podía conseguir una perforadora. Quería uno para un proyecto escolar. Y el hombre reveló el secreto sin pensárselo dos veces. Quince dólares de su madre y una búsqueda en un contenedor de basura completaron el primer truco de pirateo informático de Mitnick. Con el dinero, compró una perforadora y recogió los billetes no utilizados de las papeleras.

Pronto el chico memorizó la mayoría de las rutas útiles y las recorrió gratis. Afortunadamente, tenía todo lo necesario para engañar al sistema. El propio Kevin creía en su biografía que este hecho era uno de los asombrosos ejemplos de su memoria. Aún recuerda números de teléfono, contraseñas y otras combinaciones útiles que memorizaba de niño.

Piratería Telefónica

Mitnick era radioaficionado. En la escuela, conoció a unos chicos que también estaban metidos en esto. Uno de ellos era bueno en phreaking – pirateo de aparatos telefónicos utilizando funciones no documentadas de los aparatos ocultas al usuario:

“Podía hacer cosas increíbles con los sistemas telefónicos. Podía encontrar números no registrados y marcar el nombre de una persona. Eso fue lo que me introdujo en la piratería telefónica. Y cuando las compañías telefónicas empezaron a pasarse a los sistemas electrónicos, empezaron a utilizar los avanzados ordenadores de aquellos años para controlarlos.” dice Mitnick.

Hacking telefónico un pasatiempo de Mitnick
Hacking telefónico un pasatiempo de Mitnick

El amigo de Kevin también conocía el número secreto de prueba para hacer llamadas de larga distancia gratis. Para los dos, por supuesto. Y tampoco era un número de prueba. La compañía telefónica, según averiguó Mitnick más tarde, facturó estas llamadas a una pequeña y pobre empresa.

Los conocidos gorrones de Kevin se habían convertido esencialmente en sus hackers de guardería. Escuchó cómo llamaban a las compañías telefónicas, cómo utilizaban pequeños trucos y palabras de jerga para sonar auténticos y sugerentes. Pronto el propio Mitnick empezó a practicar el frikismo. Una de sus bromas favoritas era cambiar la clase de servicio de los teléfonos de sus amigos. Y cuando intentaban llamar a cualquier parte desde casa, eran recibidos por una voz de pago que les pedía que pusieran 10 céntimos para el coste de la llamada.

Con sólo su voz y marcación por tonos, Kevin podía obtener un número de teléfono por nombre y ciudad. Era un truco que había hecho con un profesor de un curso de informática de posgrado para entrar en su clase sin ser licenciado. El profesor quedó impresionado por las habilidades del adolescente, pero más tarde se arrepintió de haber ayudado a Mitnick a aprender informática.

Cuando Kevin tenía 17 años, la compañía telefónica le arrancó literalmente el cable del teléfono de su piso, furiosa porque el chico había pirateado su sistema utilizando técnicas de ingeniería social. Porque aún no había otras formas legales de influir en el hacker.

El ingenioso muchacho no se confundió. Vivía con su madre en un piso detrás del número 13, así que simplemente fue a una tienda de construcción y compró dos números y una letra, con lo que formó el número 12B. Así consiguió un nuevo contrato de servicios con la compañía telefónica.

A los 17 años ya había desarrollado mis habilidades de ingeniería social hasta el punto de que podía convencer a la mayoría de los empleados de Telco de cualquier cosa. Tanto si hablaba con ellos en persona como por teléfono.”

Primer Caso de Éxito como Hacker

Foto de Kevin Mitnick como Hacker
Foto de Kevin Mitnick como Hacker

En 1979, Mitnick conoció a un grupo de hackers (en aquella época, el término aún no era tan negativo) y quiso unirse a ellos, para aprender de la experiencia de sus mayores, por así decirlo. Pero decidieron ponerlo a prueba. Hackear el sistema informático de Digital Equipment Corporation. Ya tenían un número de marcación para acceder al sistema a distancia, pero necesitaban un nombre de usuario y una contraseña.

Disfrazado de uno de los principales desarrolladores del proyecto, Kevin llamó al administrador del sistema y le dijo que no podía acceder a una de sus cuentas. El tipo consiguió hablar con el empleado entre dientes y sonsacarle toda la información necesaria en menos de cinco minutos.

Pero Mitnick no se enfrentó a la justicia en este caso hasta 1988, cuando un antiguo amigo le delató. Fue detenido y condenado a un año de libertad condicional con tres años de supervisión.

Es cierto que mucho antes, Kevin ya había sido condenado. En 1981, él y unos amigos entraron en la oficina de Pacific Bell y robaron una lista de llaves de seguridad. De no haber sido por la novia de uno de los socios de Mitnick, que los delató a la policía, podría haberse evitado su primera condena y una pena de tres meses de prisión.

Los Federales lo Buscaban

Kevin era simplemente un ingeniero social nato. Por parte de padre, su línea familiar estaba formada casi en su totalidad por vendedores. Llevaba el arte de la persuasión en la sangre.

Tras otros seis meses en la cárcel por acceder ilegalmente a ARPAnet (precursor de Internet), Mitnick parece haberlo dejado, consiguió novia y sentó la cabeza. Pero, por si quería ver hasta dónde le llevaba su lengua, qué secretos desvelaría, el tipo siguió jugando con fuego y acabó en una lista federal de buscados. Sin embargo, la reputación de Kevin permitió a las fuerzas del orden culparle de todo.

Federales buscaban a Kevin Mitnick
Federales buscaban a Kevin Mitnick

En 1987, el hacker fue detenido por piratear el ordenador del editor de software Santa Cruz Operation y condenado a tres años de libertad condicional, y un año después resurgió la historia del adolescente DEC. Cierto es que el abogado consiguió entonces convencer al tribunal de que Mitnick tenía un problema de adicción a los ordenadores. Un año en la cárcel, seis meses en tratamiento de Alcohólicos Anónimos…

En 1992, Kevin desaparece del radar, justo a tiempo para el registro que los agentes del FBI querían organizar debido a un incumplimiento de la detención supervisada. Los investigadores tenían razones para creer que habían aparecido más casos extraños que se parecían al trabajo de Mitnick. Con base en algún lugar del sur de California, el hacker pudo acceder al sistema telefónico del Estado y espiar a agentes del FBI.

Gran parte de la fama de Kevin vino de la mano del periodista de The New York Times John Markoff, que relató vívidamente las aventuras del tipo y lo caracterizó como casi el mayor hacker de la época y uno de los mayores dolores de cabeza del FBI.

Por ejemplo, como escribió Markoff, en Los Ángeles, Mitnick consiguió reprogramar la red telefónica para que los agentes que rastrearan su llamada no irrumpieran en la guarida del hacker, sino en la de un inmigrante de Oriente Próximo, que estaba tranquilamente viendo la televisión.

El Final de una Carrera de Hacker

El 25 de febrero de 1994, Kevin pirateó el ordenador de casa de Tsutomu Shimomura, uno de los mejores profesionales de seguridad informática de la época, y dejó un archivo de audio insultante en su disco duro.

Shimomura, un auténtico samurái japonés, no podía perdonar semejante humillación.

Se tomó en serio a Mitnick y un año después ayudó al FBI a atraparlo.

Kevin Mitnick en prisión
Kevin Mitnick en prisión

Los sucesos de la irrupción de Shimomura y la captura de Mitnick fueron objeto de toda una película titulada “Trackdown“.

Si te interesa, te recomiendo que lo veas. Es del año 2000. También hay un libro con el mismo nombre. Más recomendado aún, en tus tiempos libros puedes ver las 10 Mejores Películas de Hacking de Todos los Tiempos.

Mitnick acabó acusado de 23 delitos y pasó 4 años en prisión. Hoy en día existen penas más graves para este tipo de delitos en Occidente.

En enero de 2000, Kevin salió de la cárcel y nunca volvió a hackear. Al menos oficialmente…

Qué Hace Ahora Kevin Mitnick

Desde que salió de la cárcel, Kevin se ha reformado. Se pasó al lado del mundo, por así decirlo. Empieza a trabajar como experto en seguridad informática y colabora activamente con la policía

En 2002, fundó Defensive Thinking Inc. (hoy Mitnick Security Consulting) para ayudar a defenderse de los ciberataques.

Trabajo actual Kevin de Mitnick dando conferencias
Trabajo actual Kevin de Mitnick dando conferencias

Según el sitio web de la empresa, Kevin da conferencias y sigue en activo en el ámbito de la seguridad de la información.

Sus servicios son utilizados por grandes empresas como IBM, Hewlett Packard, Toyota y otras.

La tarjeta de visita de Kevin Mitnick da pistas sobre sus antecedentes.

La empresa de Kevin no ha hecho nada especial. Y parece vivir de la antigua gloria de su creador. Por supuesto, la popularidad de Mitnick ha tocado techo e incluso sus objetos personales se venden por mucho dinero. Y eso con un dueño vivo.

Además, cuando Kevin Mitnick salió de la cárcel, escribió varios libros sobre sus hazañas como hacker. De hecho, aparece en nuestra lista de los Mejores Libros de Hacking.

Estos son algunos de los más destacados, escritos por Mitnick:

  1. El arte de la invisibilidad
  2. Un fantasma en el sistema
  3. El Arte de la Intrusión

Por último, mencionar que Mitnick también ha aparecido como comentarista sobre temas de seguridad en muchos canales de noticias. Ha aparecido en canales y programas como 60 Minutes, Rachel Ray, Dr. Phil, Court TV, Good Morning America, VICE – Motherboard, Burden of Proof, Street Sweep, The Screen Savers (de Tech TV), CNBC, CBS, CBC y The Learning Channel. También apareció como invitado en la serie de espionaje Alias, de la cadena ABC.

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